El CESBA recorrió el Instituto Superior de Seguridad Pública

El secretario ejecutivo del Consejo, Rodrigo Herrera Bravo, visitó las instalaciones de la escuela de la Policía de la Ciudad y habló con sus autoridades. También mantuvo un encuentro con el secretario de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, a quien invitó a concurrir al organismo que preside por Matías Tombolini.

El Consejo Económico y Social de la Ciudad de Buenos Aires (CESBA) visitó el Instituto Superior de Seguridad Pública (ISSP) este miércoles por la mañana.

El encuentro se produjo en el marco del programa CESBA en los Barrios, con el que el organismo conducido por Matías Tombolini viene recorriendo todas las comunas porteñas desde el inicio del año pasado.

En esta oportunidad, fue el secretario ejecutivo del Consejo, Rodrigo Herrera Bravo, quien se acercó a la Comuna 9 para visitar el instituto de formación policial ubicado en Santiago de Compostela 3801.

Allí fue recibido por los comisarios Claudio Peralta y Patricio Gil; el responsable del Departamento de Capacitación y Formación Permanente, Dr. Martín Nessi; el coordinador de Formación Policial, superintendente Eduardo Orueta, y el comisionado general Gustavo César Pucheta.

Luego mantuvo una reunión con el secretario de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro, a quien invitó a concurrir al Consejo.

Como acostumbra hacer en estas visitas, Herrera Bravo comenzó describiendo las funciones y tareas del CESBA, su origen constitucional y las instituciones que lo integran. También subrayó la capacidad que tiene el Consejo de presentar proyectos de ley y de realizar recomendaciones al Poder Ejecutivo porteño.

El ISSP comenzó a funcionar en 2009 como escuela de formación de la ex Policía Metropolitana. Con el traspaso de los cuerpos de la Policía Federal a la Policía de la Ciudad, la fuerza pasó de tener 6 mil oficiales a 19 mil. La adecuación de escalafones se llevó a cabo en el Instituto. También se construyeron nuevos edificios destinados a aulas y dormitorios. El régimen es de internado: los cadetes permanecen desde la noche del domingo hasta la noche del viernes siguiente.

Actualmente, la Policía de la Ciudad tiene 25 mil integrantes, los cuales realizan capacitación permanente y evaluaciones anuales. Los bomberos también se forman en el ISSP, aunque con un entrenamiento específico.

Las autoridades del Instituto contaron que todos los oficiales relacionados con la seguridad pública porteña (exceptuando los de tránsito, que están en la órbita de Seguridad Vial), se forman en el ISSP. Y que, incluso, allí se evalúa a los efectivos de las empresas de seguridad privada (hay cerca de 30 mil registrados en la CABA).

Además, resaltaron la creación de la primera universidad de la Ciudad focalizada en temas de seguridad. Al respecto, adelantaron que, además de las tres tecnicaturas que se cursan actualmente, se proyecta sumar cinco licenciaturas (esta semana, justamente, comenzó a dictarse la primera de ellas) y tres diplomaturas.

En el ISSP tienen simuladores de autos, de motos y de tiro, como paso previo al entrenamiento real. Estos simuladores reproducen los vehículos y armas con los que cuenta cada fuerza.

También poseen una formación completa de subte, en la que se practican los operativos policiales en ese medio de transporte y el tren.

El proceso de selección de cadetes se hace entre 15 mil aspirantes por año. De ese número, solo ingresa alrededor de un 10 por ciento. La gran mayoría proviene del conurbano, algunos del interior y solo un 8 por ciento es originario de la Ciudad de Buenos Aires.

“Trabajamos con un concepto de policía de proximidad y nos enfocamos, sobre todo, en la educación y la prevención”, afirmaron las autoridades del ISSP.
La formación inicial dura dos semestres. En el primero, los cadetes hacen tiro y simulaciones, pero también tienen formación académica y cultural. En el segundo se enfocan a la formación policial específica.

El tiro en móvil es un curso avanzado, ya que la mayoría de los enfrentamientos son a corta distancia. “Se coordina desde el 911 con las cámaras de seguridad para detener a los sospechosos. No se hacen persecuciones”, explicaron.

Tienen un polígono virtual en el que los cadetes practican desde el primer día (cada uno llega a hacer 500 disparos por año). “Además, se enseñan situaciones de riesgo en las que no siempre la mejor opción es disparar porque la respuesta del criminal es variable. Deben hablar con él”, apuntaron desde el ISSP.

También hay un polígono de tiro real con un instructor por cadete. Allí realizan prácticas de disparos bajo estrés. Los responsables del Instituto afirmaron que el nuevo polígono que están construyendo “va a ser uno de los más grandes de América” y va a permitir el disparo de armas largas que, por su potencia, no se practican en el actual.

Por otra parte, explicaron que los ascensos se dan por concurso. Los postulantes, tras haber estado un determinado tiempo en una jerarquía, realizan un test psicológico elaborado por la UBA, un examen médico y el PEP, que tiene dos partes: una de aptitud física y otra de actuación oficial. Aprobadas esas cuestiones pueden concursar. En ese proceso, también deben hacer una capacitación universitaria (el ISSP tiene convenios con la UCA y la UADE). Finalmente, una junta los califica.

En cuanto a la cuestión de género, los comisarios destacaron que hay formación en las diferentes instancias del aprendizaje. Y que la Policía de la Ciudad posee una Superintendencia de Violencia de Género y, en cada comisaría, una oficina especializada. Además, manifestaron que en la institución hay un protocolo para actuar ante esas situaciones.

Al finalizar la visita, los anfitriones agradecieron la presencia del CESBA en el ISSP y, desde ambas partes, quedaron en mantener el contacto para futuros encuentros.

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