Como parte de las recorridas del programa “CESBA en los Barrios”, el secretario ejecutivo del organismo, Rodrigo Herrera Bravo, se acercó a esta sala independiente, que funciona en la Comuna 6. Allí charló con su dueño, el director y dramaturgo Daniel López.
Este martes, el programa “CESBA en los Barrios” volvió a la Comuna 6. En esta oportunidad, el secretario ejecutivo del Consejo Económico y Social de la Ciudad de Buenos Aires, Rodrigo Herrera Bravo, visitó el teatro Le Cid (Biedma 1020, Caballito) y se entrevistó con su dueño, Daniel López.
Este espacio, que ya tiene más de tres años de vida, cuenta con una sala con capacidad para 120 personas, en la que se montan diversos espectáculos teatrales y musicales.
También funciona allí un taller de actuación para adultos y adolescentes, que se da todos los martes.
López viene del mundo de la docencia y se desempeñó como rector en escuelas técnicas. Luego de jubilarse, decidió cumplir su sueño de inaugurar un teatro de manera independiente. Lo construyó donde antes había un taller mecánico y allí pone hoy todo su esfuerzo.
En Le Cid está por estrenar y dirigir la quinta obra teatral de su autoría. Además, en el escenario de la sala se llevan adelante espectáculos de varieté, music hall y stand up.
Durante el encuentro, López dio a conocer cuál es su máximo problema con Le Cid: asegura que tiene todos los papeles en regla, pero que desde el Gobierno porteño se niegan a otorgarle la habilitación definitiva, por lo que aún continúa funcionando con un permiso provisorio, como muchos otros teatros independientes.
Por su parte, Herrera Bravo le explicó el funcionamiento del Consejo. Destacó su composición pluralista y su potestad para presentar proyectos de ley y para realizar recomendaciones al Poder Ejecutivo porteño.
También señaló que la actual gestión de su presidente, Matías Tombolini, tiene entre sus objetivos principales acercarse a todas las instituciones del entramado económico y social de la Ciudad de Buenos Aires, y que eso incluye también a las entidades deportivas y culturales.
Finalmente, Herrera Bravo le dijo a López que el CESBA tenía “las puertas abiertas” para recibir cualquier inquietud, vinculada su campo de acción, que quisiera acercar.
