Vivienda debatió sobre los sistemas de construcción industrializados

La Comisión que coordina la CGT estudia soluciones habitacionales para los sectores más vulnerables.

Hace algunas semanas, el CESBA presentó un proyecto de ley de viviendas para trabajadores sindicalizados. Ahora, la Comisión a cargo de esta materia está elaborando una iniciativa similar, pero para aquellos que no trabajan en relación de dependencia.  En su última reunión analizó los sistemas de construcción de viviendas industrializadas y sus diferencias con la construcción húmeda. Participaron los asesores Jorge Peláez (CGT), Carlos Marchetto y Marcela Curi (CEPUC), Vilma Paura (SUTERH), Gustavo Frojan (FECOBA), Alejandro Tesoro (UOCRA), Luciano Espósito (CEC) y Alberto Aller (SUTECBA).

En la Argentina, la construcción industrializada está en una etapa preliminar. La tradicional construcción húmeda se hace con ladrillo, arena y cemento, con altos costos de mantenimiento. En cambio, el método industrializado trabaja en seco, con placas y paneles.

Los promotores de la construcción en seco sostienen que es más económica, que permiten mayor aislación térmica y acústica y que, además, consume un 70% menos de energía que la húmeda.

También, entienden que las viviendas industriales estarían mejor preparadas para un mantenimiento estratégico: no hace falta romper paredes si hay filtraciones, por ejemplo.  

Los representantes analizaron las características de ambos métodos y quedaron en investigar si las universidades nacionales cuentan con algún sistema propio de construcción industrial y, en tal caso, convocarlas para trabajar en conjunto.

En la reunión se barajó también la posibilidad de que los beneficiarios de las viviendas participen en la construcción de las mismas, ya que esto contribuye a generar lazos de pertenencia con su futuro hogar.